El especial es de MALA FAMA... todas las semanas vas a ver un artista distinto.

Sobre el escenario le gusta llevar anteojos oscuros, pantalon de gimnasia, zapatilas de grueso porte y un cigarrillo en la boca. Esa imagen arranca suspirtos y llantos en la platea femenina... asi es Hernan Coronel, vocalista y lider de Mala Fama. Se trata de una de las bandas de cumbia villera mas importantes del momento.

El grupo es muy nuevo ya hace un año y medio que estaen el ambiente tropical. Pero no lo crearon para subirse al carro del exito de la cumbia villera. Lo hicieron porque tenian ganas de expresar todo lo que sentian y las cosas que le pasan. Asegura que no compiten para nada con los otros conjuntos que hicieron punta en esta nueva vertiente de la cumbia, como Damas Gratis. "La mayoria de nosotros somos de la zona Norte y nos conocemos bastante. Seria ridiculo que compitieramos porque hay publico para todos. Ademas, el espectro se esta abriendo cada vez mas. Fijate que muchas bandas tienen acceso a programas importantes como el de Marcelo Tinelli. O sea que estamos en nuestro mejor momento"; dice Hernán. Hincha confeso y sufrido de Racing aunque ahora su equipo salió campeon, él maneja como pocos el lenguaje que usan "los pibes". "Yo hablo como lo hacemos con mis amigos. Sabemos que cantina se le dice al que gasta toda la plata en la barra del boliche, guachin es un chabon, rescatarse es dicimular un mal momento. Y asi hay un monton".

Les cantan a lo que pasa en el barrio, historias callejeras, es de lo que pueden hablar porque lo viven a diario. El nombre de la banda se debe a los prejuicios de la gente; sobre esto Hernan dice: "En cualquier lugar ven a un grupo de chicos sentados o reunidos en una esquina y enseguida hay comentarios de que estan haciendo algo malo. Es como que todos tenemos mala fama". Con su particular estilo, el cantante pelilargo sabe lo que despierta en las chicas. Todas mueren por el y mas en las salidas de los bailes se le cuegan del cuello y no quieren soltarlo y a veces si le gusta le da un beso.

Una anecdota: "una vez fui con una chica a un hotel alojamiento y nos quedamos tanto tiempo que no me alcanzaba la plata para pagar. Tuvo que venir mi representante a levantar el muerto. Pero quien me quita lo bailado"; dice Hernán.